lunes, 26 de septiembre de 2011

ORACIÓN AL CRISTO DE LA MISERICORDIA


Queridos hermanos,

la estrecha colaboración en que han trabajado algunas personas de laCofradía del Santísimo Cristo de la Misericorida y Nuestra Señora del Mayor Dolor ha permitido, tras el debido estudio y las consultas pertinentes, la confección con absoluto respeto a los dogmas y misterios católicos de una plegaria particular a nuestro titular que se pretende acompañe impresa a su Imagen y se distribuya
periódicamente entre sus fieles, considerando un gran motivo de gozo y alegría en este año tan especial para nosotros el sueño de contar con unas palabras de acercamiento a Jesús adecuadas, útiles, de profunda humildad cristiana, y de algún modo vertidas en una fórmula uniforme
que aquilate aún más nuestras intenciones y nos una en el íntimo ritual de situarnos frente a Dios.
Presentada solicitud de autorización eclesiástica para su utilización y publicación el pasado mes de junio, tras el informe favorable del Censor del Obispado de Córdoba, su Vicario General concedía dicha licencia con fecha de 20 de julio de 2011.
A vuestra disposición es puesta desde hoy esta Oración, con el limpio
y noble deseo de que os sirva y reconforte en vuestros diálogos con Cristo.

Un abrazo a todos y que nuestro Titular nos proteja siempre, a
nosotros y a nuestras familias.

¡VIVA EL SANTÍSIMO CRISTO DE LA MISERICORDIA!
¡VIVA NUESTRA SEÑORA DEL MAYOR DOLOR!

Ángel Esojo
COFRADE MAYOR.



ORACIÓN AL SANTÍSIMO CRISTO DE LA MISERICORDIA
Santísimo Cristo de la Misericordia, que en el angustioso momento de vuestra sagrada expiración encomendáis vuestro espíritu al Padre Eterno, que nos entregáis vuestro cuerpo y vuestra sangre preciosísimos como fruto de redención y que al punto cerraréis vuestros ojos como divina crisálida en puro e infinito amor convertida, heme de nuevo aquí, a vuestras plantas. Sabiéndome vuestro hijo más indigno y último, no obstante, me atrevo a acercar mis labios a vuestros pies, Cáliz de plenitud Vos, manantial de perdón, fuente de luz y esperanza, con la confianza con que un hijo en estado de necesidad se dirige a su padre, seguro de ser escuchado.
Por vuestra preciosísima sangre, por vuestra pasión y muerte, Señor mío, yo os imploro… (Pídase la gracia)
Santísimo Cristo de la Misericordia, que el Espíritu Santo descienda delicado sobre mí y me sea divino broquel en estos momentos de adversidad. (Padrenuestro que estás en el Cielo…)
Santísimo Cristo de la Misericordia, por las llagas de vuestros clavos y por ese inmaculado corazón de Madre que a vuestra orilla encaja los más hirientes puñales de dolor, disculpad e ignorad nuestras torpezas y nuestros abominables pecados y atended a nuestras súplicas. (Padrenuestro que estás en el Cielo…)
Santísimo Cristo de la Misericordia, luz de nuestras vidas, no tardéis en socorrerme. (Padrenuestro, Avemaría y Gloria)
Sagrado Corazón de Jesús, en Vos confío; Dulce Corazón de María, sed la salvación Mía.
Santo Dios, Santo Fuerte, Santo Inmortal, tened Misericordia de nosotros y del mundo entero.
Récese con absoluta confianza nueve días consecutivos, a ser posible a las 3 de la tarde, la hora de la expiración, la hora de la Misericordia.
Oración de los Hermanos Cofrades del Santísimo Cristo de la Misericordia y Nuestra Señora del Mayor Dolor de Puente Genil para la que fue obtenida autorización eclesiástica con fecha de 20 de julio de 2011.




Schola Cantorum en la comida de la Función del año 2009 (Cuartel de Los Samaritanos)